¿Qué le depara a los republicanos y demócratas en las elecciones de 2026?
Las primarias muy disputadas para el Congreso y la gobernación el próximo año no solo elegirán nuevos candidatos para importantes contiendas de mitad de período, sino que también servirán como primeros campos de batalla en la lucha por el futuro de ambos partidos, mientras que los demócratas y republicanos navegan cómo avanzar después de las elecciones de 2024.
Aunque los demócratas han celebrado victorias a lo largo de las elecciones este año, todavía buscan definición y dirección después de su derrota en 2024 ante el presidente Donald Trump. El partido está dividido sobre qué estrategias e ideologías adoptar, así como el cuestionamiento de elevar y abrazar a una nueva generación de líderes a costa de los incumbentes mayores y establecidos.
Los republicanos también están considerando cómo debería ser el futuro de su partido, tras la toma de control de Trump del GOP o el partido republicano. La lealtad al presidente continúa definiendo las contiendas republicanas, y algunas primarias de 2026 pondrán a prueba si Trump puede vengarse de los republicanos que se le han opuesto.
Otras medirán hasta qué punto el movimiento “Make America Great Again” de Trump está redefiniendo al partido republicanos. Todas estas ideas y resultados podrían influir también en la próxima carrera presidencial. Además, hay muchas formas en las que las primarias del próximo año serán pruebas tempranas para los líderes de ambos partidos que contemplan campañas para la Casa Blanca en 2028, con algunos ya tomando partido en contiendas clave.
Aquí están los temas clave a observar en las primarias a medida que se acercan las elecciones intermedias del próximo año.
Debatiendo el futuro de los demócratas
Votantes y candidatos demócratas están divididos en muchos aspectos actualmente, incluyendo estrategia, ideología y estilo. En última instancia, el conflicto trata de lo que resulta más atractivo para los votantes, desde algunos que han abandonado el partido hasta la idea de atraer nuevos votantes que pueden estar desilusionados con la política en general.
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Esa lucha se desarrolla en la primera primaria importante el 3 de marzo en Texas. La representante Jasmine Crockett lanzó su carrera para el Senado atacando directamente a Trump y sugiriendo que puede atraer a nuevos votantes y construir una “coalición multirracial y multigeneracional”. Mientras tanto, el representante estatal James Talarico se presenta como un candidato dispuesto a enfrentarse a su partido y apelar a votantes de ambos partidos que están “hambrientos de sinceridad, honestidad y compasión.”
Las divisiones ideológicas del partido también están presentes en dos primarias demócratas para el Senado en Michigan y Minnesota, probando diferentes teorías sobre cómo ganar en los tradicionales estados de “muro azul” donde los republicanos han hecho avances en los últimos años.
En Michigan, el exdirector de Salud del Condado Wayne, Abdul El-Sayed, se postula como un progresista sin disculpas, apoyando el “Medicare para Todos” y respaldado por el senador Bernie Sanders, I-Vt. La senadora estatal Mallory McMorrow lanzó su carrera solicitando “una nueva generación de liderazgo” y se autodefine como “pragmática”. Y la representante Haley Stevens, quien logró ganar un distrito republicano en 2018 y es una líder del “grupo de nuevos demócratas centro-izquierda”, lanzó su carrera criticando las políticas arancelarias de Trump.
En Minnesota, la vicegobernadora Peggy Flanagan se presenta como una firme progresista en la carrera para reemplazar a la senadora demócrata Tina Smith, quien se retira, y cuenta con el respaldo de Sanders y otros líderes liberales. La representante Angie Craig, quien ha representado un distrito oscilante, ha afirmado que el Partido Demócrata debe ser una “gran carpa”, rechazando los llamados de la extrema izquierda para reducir el financiamiento a la policía.
También se está gestando una batalla por el alma del partido en las primarias para gobernador en California, donde los dos principales candidatos, sin importar el partido, avanzan a una elección general. Los principales candidatos demócratas están marcando rutas con diferentes teorías sobre cómo conquistar a los votantes del partido en su propia tierra.
El exsecretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, está llevando a cabo una campaña centrada en la atención sanitaria; la exrepresentante Katie Porter está apostando por el populismo progresista que la ayudó a ganar contiendas competitivas en la Cámara; el multimillonario Tom Steyer está alejándose de su enfoque en el clima y abrazando una campaña centrada en la asequibilidad y el enfrentamiento con las grandes empresas; el representante Eric Swalwell está apoyándose en sus enfrentamientos con Trump; y el exalcalde de Los Ángeles Antonio Villaraigosa está destacando su experiencia ejecutiva.
La venganza de Trump
Las preguntas sobre la lealtad a Trump rondan casi todos los concursos primarios republicanos a lo largo de la boleta. Pero en algunos casos, es el debate dominante.
Trump ha respaldado al veterano de la Marina Ed Gallrein contra el representante de Kentucky, Thomas Massie en las primarias del Partido Republicano, después de que Massie atrajera repetidamente la ira de Trump por criticar el manejo del presidente de los archivos de Jeffrey Epstein y oponerse a piezas clave de su agenda de política interior y exterior.
El presidente también ha apoyado la candidatura de Burt Jones, vicegobernador de Georgia, para gobernador, elevándolo en unas primarias concurridas que incluyen a otros destacados funcionarios electos de Georgia. Esa bendición llegó años después de que Jones firmara de manera controvertida un grupo de electores pro-Trump que afirmaron falsamente que Trump ganó las elecciones de 2020.
Otra carrera clave dominada por la lealtad a Trump es la carrera al Senado de Luisiana, donde el senador Bill Cassidy, uno de los pocos miembros republicanos del Congreso que votó para condenar a Trump después de su segundo impeachment, se postula para la reelección.
Los bien financiados oponentes republicanos de Cassidy, incluidos el tesorero estatal John Fleming y el senador estatal Blake Miguez, han abrazado a Trump y enmarcado el voto de condena de Cassidy después del motín del 6 de enero como una traición.
Cassidy, un médico, ha hecho una serie de gestos hacia Trump como presidente del comité de salud del Senado, incluyendo dar luz verde a la nominación de Robert F. Kennedy Jr. como Secretario de Salud y Servicios Humanos, a pesar de las preocupaciones de Cassidy sobre el activismo anti-vacunas de Kennedy.
La inquietud de la izquierda
Para muchos demócratas, el camino a seguir implica desafiar a los líderes del partido y elevar a los más jóvenes después del mandato del ex presidente Joe Biden como líder del partido, y su fin abrupto y dañino para el partido en 2024.
La inquietud de los demócratas contra el poder establecido está alimentando las primarias en todo el mapa del Senado, especialmente en Maine, donde la gobernadora Janet Mills, de 77 años, se enfrenta al veterano militar Graham Platner, de 41 años, en las primarias para enfrentarse a la senadora republicana Susan Collins.
Mills, a quien el líder de la minoría del Senado Chuck Schumer, D-N.Y., instó a postularse, se ha presentado como la demócrata mejor posicionada para derrotar a Collins, pero ha prometido solo cumplir un mandato si es elegida, reconociendo que “la edad es una consideración”.
Platner, un progresista también respaldado por Sanders, ha denunciado a Schumer, quien fue elegido por primera vez para el Senado estadounidense en 1998, y a los líderes demócratas, argumentando que “la gente no quiere políticos del ‘establishment'”.
Platner también culpó al “poder” o “establishment” por divulgar información poco favorable sobre su pasado, en medio de revelaciones de que tenía un tatuaje que se asemejaba a un símbolo nazi, que desde entonces ha cubierto, y publicaciones pasadas en Reddit que incluían una serie de comentarios controvertidos y ofensivos.
Platner se disculpó por muchas de las publicaciones, diciendo que estaba “desilusionado” después de su servicio militar.
Esa angustia en la izquierda también está llevando a desafíos contra legisladores demócratas en funciones, ya que grupos progresistas se han unido para derrocar a los titulares que dicen no están haciendo lo suficiente para combatir a Trump.
Algunas de esas primarias incluyen la carrera de la Comisionada del Condado Durham, Nida Allam, contra la representante de Carolina del Norte Valerie Foushee, en una revancha primaria de 2022; el desafío del senador estatal Donavan McKinney contra el representante de Michigan Shri Thanedar; la carrera del representante estatal Justin Pearson contra el representante de Tennessee Steve Cohen; y el desafío de la abogada y barista Melat Kiros contra la representante de Colorado Diana DeGette.
Las primarias demócratas para la Cámara de Representantes de Nueva York el próximo año también se han convertido en un semillero de inquietud anti-establishment, ya que los desafiantes contra los representantes Ritchie Torres y Dan Goldman han criticado el apoyo que recibieron de grupos pro-Israel en elecciones pasadas.
En un video de lanzamiento para su candidatura primaria para desbancar a Goldman a principios de este mes, el Contralor de la ciudad de Nueva York Brad Lander señaló específicamente las donaciones a Goldman del grupo de cabildeo pro-Israel, el Comité de Asuntos Públicos Americano-Israelí, o AIPAC.
La ex representante de Missouri Cori Bush también está haciendo una carrera por su antiguo escaño al desafiar al representante Wesley Bell en una primaria. Bell derrotó a Bush en una primaria el año pasado cuando obtuvo un impulso de un grupo afiliado a AIPAC.
Algunos demócratas que desafían a los legisladores mayores con un argumento a favor del cambio generacional, mientras tanto, ya están recaudando fondos significativos.
El representante de California Mike Thompson, de 74 años, y el representante de Connecticut John Larson, de 77 años, enfrentan cada uno desafíos primarios demócratas que recaudaron más de 1 millón de dólares en el tercer trimestre de este año.
En Georgia, el representante David Scott, de 80 años, que ha servido a su distrito desde 2003, ha enfrentado preocupaciones sobre su edad y salud durante años, y múltiples desafiantes primarios han planteado la cuestión.
En Massachusetts, el representante demócrata Seth Moulton lanzó a principios de este año un desafío primario contra el senador Ed Markey, D-Mass., de 79 años, enmarcando su candidatura en torno al impulso por una generación más joven de líderes demócratas.
Markey, quien sirvió en la Cámara antes de ser elegido por primera vez para el Senado en 2013 y ha sido considerado durante mucho tiempo un campeón progresista, repelió a un desafiante primario más joven en 202, cuando derrotó al entonces representante Joe Kennedy III.
Pruebas de pureza a MAGA
Aparte de las carreras mencionadas anteriormente que se centran específicamente en Trump, una serie de otras primarias del Partido Republicano pondrán a prueba cómo él ha remodelado el Partido Republicano.
La más trascendental puede ser en Texas, donde la guerra civil del Partido Republicano que ha dominado la política estatal durante la última década ha culminado en múltiples oponentes primarios desafiando al senador John Cornyn.
Trump, quien no ha respaldado, es un tema central en esta carrera. Mientras el Fiscal General Ken Paxton ha martillado las críticas pasadas de Cornyn al presidente, Cornyn ha corrido para presentarse como uno de los principales lugartenientes de Trump en el Senado, y el representante Wesley Hunt ha promocionado su apoyo temprano para la campaña de Trump en 2024.
Pero las líneas divisorias se extienden más allá de Trump, hacia temas como las armas y la inmigración.
La primaria republicana de Kentucky para reemplazar al senador jubilado Mitch McConnell presenta a tres principales candidatos republicanos compitiendo para defenderse de las acusaciones de que no son lo suficientemente puros para ser los nuevos portadores estándar del Partido Republicano.
La primaria republicana para gobernador en Arizona presenta al leal de largo tiempo a Trump, el representante Andy Biggs, y a la ex miembro de la Junta de Regentes del estado Karrin Taylor Robson, quien se ha rebrandeado como una firme aliada de Trump cuatro años después de postularse en una candidatura más alineada con el establishment contra el candidato elegido por Trump.
Trump decidió respaldar a ambos candidatos, meses antes de que el representante David Schweikert lanzara su propia candidatura a gobernador. Otra primaria estatal republicana acalorada que vale la pena observar es la contienda por la gobernación de Carolina del Sur, que presenta un grupo abarrotado de prominentes republicanos peleando por el carril pro-Trump.
Un puñado de republicanos de la Cámara de Representantes enfrenta desafíos en las primarias de opositores que cuestionan su lugar en el Partido Republicano de Trump.
El representante de Texas Tony Gonzales, quien derrotó por poco a un retador republicano de línea dura en una segunda vuelta el año pasado, está listo para una revancha contra la personalidad de YouTube pro-armas Brandon Herrera, aunque Gonzales consiguió un respaldo de Trump a principios de este mes.
El representante de Texas Dan Crenshaw también se postula para la reelección en un campo que incluye al representante estatal conservador Steve Toth, con líneas divisorias emergentes en temas como Ucrania y gasto gubernamental.
Observación de 2028
Posibles candidatos presidenciales de ambos lados del espectro político también están considerando las primarias como oportunidades para definir su propio futuro político y probar su influencia sobre los fieles seguidores de los partidos.
En Illinois, el gobernador demócrata JB Pritzker, quien se postula para un tercer mandato el próximo año pero también es visto ampliamente como un posible candidato presidencial en 2028, ha respaldado a la vicegobernadora Juliana Stratton en la concurrida primaria demócrata para el Senado para suceder al senador demócrata Dick Durbin, quien se retira.
Mientras tanto, al menos cinco pesos pesados demócratas nacionales, y potenciales contendientes presidenciales, han tomado partido en la carrera por el Senado de Minnesota.
El exsecretario de Transporte Pete Buttigieg y el senador Ruben Gallego, D-Ariz., han respaldado a Craig. Por otro lado, las senadoras Elizabeth Warren, Chris Murphy y Chris Van Hollen han respaldado a Flanagan, señalando las divisiones acerca del futuro del partido que ya emergen entre los potenciales candidatos presidenciales de 2028.
Gallego, quien está considerando abiertamente una candidatura presidencial, también intervino en la contenciosa primaria demócrata del Senado de Michigan al respaldar a Stevens poco después de que lanzó su campaña.
En Pensilvania, el gobernador demócrata Josh Shapiro a principios de este mes se involucró en una primaria concurrida en uno de los distritos de la Cámara de Representantes más divididos del país. Shapiro respaldó al líder sindical de bomberos Bob Brooks, quien compite contra otros cuatro oponentes demócratas bien financiados en la primaria y también ha obtenido el apoyo de Sanders.
Por otro lado, el gobernador de Georgia, Brian Kemp, es ampliamente visto como un candidato potencialmente formidable para las primarias presidenciales republicanas de 2028. Kemp rechazó una candidatura al Senado a pesar de ser reclutado por líderes republicanos. En su lugar, respaldó al exentrenador de fútbol de la Universidad de Tennessee, Derek Dooley, en la primaria republicana del Senado del estado, que se ha vuelto tensa en las últimas semanas.
Dooley se enfrenta a los representantes republicanos Buddy Carter y Mike Collins, dos de los aliados de Trump en la Cámara, por la oportunidad de enfrentarse al senador demócrata Jon Ossoff en las elecciones generales. El presidente aún no ha respaldado en esta carrera, pero si Dooley gana la primaria tras el apoyo sostenido de Kemp, podría ser una señal importante de la influencia y popularidad del gobernador con el electorado republicano en un estado crucial en la batalla electoral.
Este artículo fue publicado originalmente en inglés por Bridget Bowman, Ben Kamisar y Alexandra Marquez para nuestra cadena hermana NBC News. Para más de NBC News, entra aquí.
Esta historia fue traducida del inglés con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa. Un editor de Telemundo Digital revisó la traducción.