Senador de Illinois, Dick Durbin, decide que 'ya es hora' de retirarse; no buscará la reelección

El senador demócrata Dick Durbin no buscará un sexto mandato el próximo año, según lo ha confirmando a WBEZ en una exclusiva anunciando que dejará el cargo en 2027, un movimiento muy esperado que sin duda desatará una enorme lucha interna por la sucesión en su partido.

“He decidido no postularme a la reelección. Así que dentro de un año y medio me estaré retirando. Planeo trabajar a tiempo completo hasta ese momento, pero no voy a hacer campaña para la reelección”, dijo Durbin durante una entrevista en el centro de Chicago.

Una de las principales razones de su decisión se redujo a una sola cosa: su edad. Para cuando termine un sexto mandato, Durbin tendrá 88 años.

“Ya es hora”, dijo el senador de Illinois, que tiene 80 años de edad. “Observas a tus colegas y ves lo que sucede. Para algunos de ellos, hay un proceso de envejecimiento milagroso donde parecen no envejecer demasiado”.

“Tomen a Bernie Sanders, por ejemplo, que es mayor que yo, o a Chuck Grassley, quien aún realiza reuniones en cada condado del estado cada año”, dijo, refiriéndose al octogenario senador de Estados Unidos independiente de Vermont, y al senador republicano de Iowa, nonagenario, que son ambos mayores que Durbin.

“Pero otras personas no tienen tanta suerte”, continuó. “Así que, observas el envejecimiento, y tratas de medirlo hasta el punto en que puedas salir por la puerta de enfrente. No tengo que ser llevado. Me siento así ahora. Soy fuerte física y mentalmente. Pero no quiero esperar demasiado y poner a prueba el destino”.

Durbin había mantenido en secreto su decisión, compartiendo la noticia con un círculo muy cercano de amigos. Le notificó a su personal el miércoles por la mañana que no buscaría la reelección.

WBEZ y The New York Times fueron los que informaron primero sobre la decisión de Durbin.

La larga lista de posibles sucesores

Su anuncio promete tener efectos sísmicos en la política de Illinois, donde una larga lista de demócratas ha estado maniobrando silenciosamente desde el año pasado para posicionarse como su heredero aparente en caso de que decida retirarse.

La lista de posibles sucesores demócratas es extensa y está encabezada por figuras como el exalcalde de Chicago Rahm Emanuel, la vicegobernadora de Illinois Juliana Stratton y el representante de Estados Unidos por los suburbios del noroeste, Raja Krishnamoorthi, quien ha acumulado un fondo político de $19 millones.

Otros demócratas que podrían estar en la lista incluyen a la representante Lauren Underwood y a la representante Robin Kelly.

Durbin dijo que no tiene intención de respaldar a un candidato en las primarias, a menos que surja algo que “sea serio y necesite abordarlo”.

“Hay al menos una docena de nombres que creo son serios. Has mencionado varios de ellos”, dijo, citando la lista de posibles candidatos mencionados anteriormente. “Pero hay un número mayor que se ha acercado a mí y ha dicho que podría estar interesado en esto”.

A pesar de que los demócratas no controlan ninguna cámara del Congreso ni la Casa Blanca, perder a Durbin y su antigüedad en Capitol Hill será un golpe para el estado. Como el látigo demócrata del Senado, Durbin es el miembro de mayor rango de su caucus político, lo que le otorgó una influencia desproporcionada en la política nacional y en la política federal. También es el demócrata de mayor rango en el Comité Judicial del Senado y pasó 26 años en el Comité de Apropiaciones del Senado, que es el panel principal de redacción del presupuesto de la cámara.

La salida de Durbin ofrece una oportunidad —aunque remota— a los republicanos de Illinois para obtener uno de los auténticos cargos políticos de alto perfil del estado. El último senador republicano en Illinois fue Mark Kirk, quien fue derrotado en 2016 tras un mandato por Tammy Duckworth, quien sigue en el cargo.

Si Durbin hubiera elegido postularse en 2026, habría sido un favorito abrumador para la reelección dado que los republicanos no han logrado llevar a cabo elecciones competitivas en su contra durante ninguna de sus cinco candidaturas al Senado.

El crítico de Trump

No hubo señales dentro del Partido Demócrata de que alguien estuviera contemplando un desafío en las primarias contra Durbin el próximo año, pero enfrentó momentos de

inquietud impulsada por Trump de algunos aliados progresistas en casa.

El mes pasado, Durbin recibió críticas inusualmente duras de una coalición de grupos demócratas prominentes. Ese grupo, que incluía a la Federación Laboral de Chicago, grupo de derechos al aborto Personal PAC, Equality Illinois y otros, dijo estar “profundamente decepcionado” por su voto a favor de una resolución presupuestaria continua solicitada por la administración de Trump para evitar que el gobierno federal cerrara.

Durbin defendió su posición, afirmando que un cierre habría sumido al país en el caos y la agitación, y luego se reunió con el grupo para explicarle su voto.

Aun así, Durbin ha sido un crítico frecuente y duro de las políticas comerciales de Trump, los nombramientos de su gabinete y el desmantelamiento del gobierno federal a través de despidos masivos y cierres de agencias.

Es un papel de oposición que Durbin dice que continuará desempeñando durante sus próximos 20 meses en el cargo, período en el que dice que el futuro de la democracia estadounidense está en un “punto de inflexión”. El desprecio de la administración de Trump por las órdenes judiciales y sus ataques a las normas constitucionales han dejado a Durbin incierto sobre cómo terminará la segunda fascinación de Estados Unidos con Trump.

“He preguntado a algunos abogados expertos aquí en Chicago, ‘¿Cuál es el objetivo final aquí?’. La orden judicial él la desafía. La corte intenta hacerla cumplir. ¿Hacia dónde vamos? Ellos dijeron, 'Senador, no tenemos ningún precedente en la historia para esto. Está desafiando la constitución a un nivel que nunca hemos visto antes.'"

Dejar el cargo en un momento tan existencial le da pausa a Durbin.

"Cuando pienso en eso y lo que está en juego, sí, pienso largo y tendido si esta es la decisión correcta. Pero sé que tengo que hacerlo," dijo.

El ascenso de Durbin al poder

Cuando Durbin se postuló por primera vez para el Senado en 1996 para sustituir al senador demócrata Paul Simon, que se jubilaba, lo hizo con el apoyo anticipado de Simon. Vestido con su característica corbata de moño, Simon apareció en un inolvidable comercial de campaña con Durbin, apoyándolo como su reemplazo preferido, y Simon recorrió el estado haciendo campaña junto a Durbin.

Ese respaldo ayudó a impulsar a Durbin más allá de un Partido Republicano fragmentado que inesperadamente había nominado a un legislador de la facción más extrema del partido, el exrepresentante Al Salvi, esposo de la actual presidenta del Partido Republicano del estado, Kathy Salvi.

Antes de convertirse en senador, Durbin fue un congresista durante siete mandatos, quien consideraba a Simon como un amigo cercano y un mentor político de largo tiempo.

El primer trabajo de Durbin en el gobierno fue trabajar para Simon cuando él era vicegobernador de Illinois. La primera experiencia genuina de Durbin en la política llegó antes de eso, cuando se ofreció como voluntario en la campaña de reelección perdedora de 1966 del senador demócrata Paul Douglas, un mentor de Simon.

Douglas y Simon acumularon currículos políticos libres de cualquier sospecha de corrupción. Y así ha sido para Durbin estos últimos 42 años en el cargo federal, incluidos los últimos 28 en el Senado.

Con su carrera de varias décadas, Durbin se erige como el senador de Illinois de mayor tiempo en el cargo elegido por el pueblo en la historia del estado. Si asume que terminará su mandato actual en enero de 2027, el tiempo de Durbin como senador superará los 30 años del mandato designado del senador Shelby Morris Cullom de la era de 1800, quien sirvió desde 1883 hasta 1913, convirtiéndose en el senador de Illinois de mayor tiempo en el cargo de manera absoluta.

El poder subestimado de los votantes del sur del estado

En algunos aspectos, Durbin es una anomalía de una era diferente cuando los demócratas al sur de la Interestatal 80 todavía podían ganar elecciones. Esa parte de Illinois es ahora principalmente roja políticamente.

Durante las cinco campañas de Durbin al Senado de Estados Unidos, derrotó a una lista de republicanos, siempre superando victorias de más de 10 puntos porcentuales a nivel estatal. En un año, 2008, casi logró una derrota de 40 puntos porcentuales sobre su oponente al conseguir un impresionante 68% de los votos.

Pero en sus dos intentos más recientes, su antiguo hogar, el condado de Sangamon, optó por sus oponentes republicanos, subrayando el endurecimiento de la identidad republicana en la región y cómo la verdadera fuerza electoral de Durbin radicaba en Chicago y en los condados demócratas ricos en votos.

“Un tipo llamado Lincoln tuvo el mismo problema. Ganaba la elección y perdía su condado natal, o al menos sus distritos electorales frecuentemente”, destacó Durbin.

Su antiguo distrito de la Cámara, que cubre parte de Springfield y áreas rurales alrededor de la capital, es un área que lo eligió siete veces para el Congreso, pero él dice que probablemente no podría ganar allí ahora.

“De alguna manera, construí el apoyo en esa área, y estaba muy por encima del 50% en apoyo. Ahora no podría ganar en esa área ni aunque llevara una pistola en el bolsillo”, dijo, aludiendo al fuerte apoyo de derechos de armas de la región. “Es un área política muy dura. Así que, las cosas cambian, los votantes cambian, pero nunca debes rendirte en parte de nuestro estado”.

Durbin instó a sus sucesores a cumplir con ese principio y no descuidar el sur del estado, incluso si es un área en la que los republicanos tienen una mayoría clara. Su partido tiene la obligación de extender la mano a todas las áreas de Illinois, destacó.

“Mi consejo a cada uno de ellos es conocer todo el maldito estado de un extremo al otro. No dejes que la gente en el sur de Illinois diga, ‘nunca veo a ese senador.' Sé parte de sus vidas. Es una parte importante de nuestro estado, y no des por dado que van a votar por ti o en tu contra”, dijo. “Haz tu trabajo”.

Durbin agradeció a su esposa, Loretta, y a sus hijos por haber “estado a mi lado y aceptado las exigencias de mi carrera pública”. Y en este importante momento en el que cierra su carrera política, Durbin dijo que su familia nuevamente lo respalda.

“Esta es una empresa familiar”, dijo Durbin sobre su decisión de no buscar la reelección. “Ellos sabían que tenía que tomar la decisión. Y están conmigo, y eso marca una gran diferencia”.

La carrera histórica de Durbin

A lo largo de su larga trayectoria en el Senado bajo cinco presidentes diferentes, Durbin ha dejado una marca duradera.

Cuando los demócratas controlaban el Senado y Joe Biden era presidente, Durbin presidió el influyente Comité Judicial del Senado. Allí, supervisó la confirmación de 235 jueces nombrados por Biden para puestos vitalicios en el banco federal. Entre ellos se encontraba la jueza de la Corte Suprema, Ketanji Brown Jackson, la primera mujer negra en servir en la corte alta del país.

Como congresista, Durbin logró una victoria legislativa crucial al eliminar el tabaquismo en lugares públicos. Escribió la ley federal en 1987 que terminó con el tabaquismo en aviones, lo que posteriormente abrió el camino para las prohibiciones de fumar en bares y restaurantes, lugares de trabajo, edificios públicos y hospitales. Posteriormente, las muertes relacionadas con el tabaquismo disminuyeron drásticamente.

Otra de las prioridades de Durbin fue crear salvaguardias contra la deportación para jóvenes inmigrantes indocumentados traídos a Estados Unidos de niños. En 2001, Durbin presentó su primera legislación sobre el tema. Pero no fue hasta 2012, bajo el establecimiento por parte del presidente Barack Obama del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que el esfuerzo de Durbin se convirtió en realidad.

Hasta septiembre pasado, ese programa que permite a los jóvenes inmigrantes estudiar y trabajar en Estados Unidos sin temor a la deportación ha impactado a más de medio millón de personas, según la oficina de Durbin. Sin embargo, Trump ha mostrado interés en eliminar el programa, y ha sido el punto focal de desafíos legales por parte de estados liderados por republicanos.

Y en cuanto al aborto, Durbin, un católico romano, se convirtió en un defensor del movimiento por los derechos al aborto. A finales de la década de 1980, se opuso a los derechos al aborto, incluso abogando por la revocación del histórico caso Roe v. Wade de la Corte Suprema que legalizó el aborto. Pero Durbin cambió de rumbo después de escuchar historias individuales de sobrevivientes de violación e incesto.

En 2004, a Durbin se le prohibió recibir la comunión en su parroquia de Springfield debido a su posición sobre los derechos al aborto como senador. Esa directiva de dos obispos locales sucesivos se mantiene vigente, y Durbin ha caracterizado el ser negado la comunión como “una experiencia no muy feliz”.

La influencia duradera de Durbin

Durbin ha ayudado a moldear y promover a jóvenes demócratas de maneras significativas.

Durbin fue el primer senador de Estados Unidos en respaldar la candidatura del entonces senador Barack Obama para la presidencia. El respaldo de Durbin fue seguido por otros demócratas de renombre, incluido el senador por Massachusetts, Edward Kennedy, eligiendo a Obama sobre su rival en las primarias, Hillary Clinton, para la nominación presidencial del partido demócrata en 2008.

Más cerca de casa, Durbin fue un respaldo clave de Duckworth para el Senado. En 2015, respaldó su candidatura para destituir a Kirk, un republicano de un solo mandato, el año siguiente. El respaldo ayudó a Duckworth a superar la primaria de tres candidatos, y luego le ganó a Kirk en la elección general de 2016 por casi 1 millón de votos.

“Es una de mis mejores amigas. Es una de los miembros más efectivos del Senado. Cuando Tammy Duckworth sube al [Senado] para hablar sobre veteranos o el ejército, la gente escucha, como debería ser, como todos deberíamos hacer. Así que no es que esté abandonando al estado”, destacó Durbin. “Lo estoy dejando en buenas manos con Tammy Duckworth”.

En cuanto a cómo espera que los votantes de Illinois lo recuerden cuando deje el cargo en 2027, Durbin dijo: “Espero que crean que soy honesto, y espero que crean que he trabajado duro en mi labor, y he hecho algunas cosas que podrían mejorar las vidas de ellos y de sus familias. Eso es todo lo que puedo pedir. Esa es la conclusión”.

Dave McKinney cubre gobierno y política de Illinois y durante muchos años fue el jefe de la oficina de Springfield para el Chicago Sun-Times.

Traducido por La Voz Chicago con inteligencia artificial (AI)